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sábado, 25 de septiembre de 2021

El árbol de los deseos

Ayer estuve en un precioso museo de Madrid que no es muy conocido: el museo Lázaro Galdiano. Además del estupendo edificio y su decoración y de la magnífica colección de arte, estos días hay otra curiosidad: durante unos días, en un rincón del jardín, el llamado patio de los naranjos, el museo colabora en un proyecto que comenzó Yoko Ono hace veinticinco años.

El proyecto Wish Tree recoge deseos colgados de árboles en ciudades de todo el mundo. La gente cuelga papelitos con un deseo de las ramas de un árbol; estos papelitos se le envían a Yoko Ono y son enterrados en la base de la torre Imagina la paz, en una isla islandesa. Esta torre es una instalación de luz que recuerda a su marido, el músico John Lennon, y a su canción Imagine.

El espacio donde los madrileños y los turistas están colgando sus deseos es este:


Aprende español callejeando: El árbol de los deseos


Son seis naranjos pequeños de cuyas ramas, como ves, cuelga ya un montón de deseos. Como esta semana ha llovido bastante, algunos se han borrado, pero he fotografiado algunos para que veas qué desean los madrileños (y turistas) del año 2021.

Algunos formulan deseos muy, muy concretos:


Aprende español callejeando: El árbol de los deseos


Aprobar el carnet de conducir y aprobar las asignaturas de la Universidad puede ser fácil. Aprobar unas oposiciones es un tema más serio ya, porque las oposiciones son una combinación de méritos y examen en las que compites con otros candidatos para conseguir ser funcionario y tener un trabajo garantizado para toda tu vida. Además, esta persona quiere que su hija apruebe las oposiciones a notarías, o sea, que su hija consiga un puesto de notaria. Un notario es el funcionario que redacta y controla la legalidad de la firma de los documentos de compra y venta de casas, de testamentos, etc., así que tiene mucho trabajo y bien pagado.

Estos primeros dos ejemplos nos sirven para recordar que en español, después de verbos como querer y desear, usamos infinitivo cuando hablamos todo el tiempo de la misma persona (deseo aprobar) y usamos que + subjuntivo cuando hablamos de diferentes personas (deseo que mi hija apruebe).

Muchas personas que han escrito en este jardín escriben deseos para sí mismas, y por eso muchas veces usan infinitivo. Por ejemplo: 


Aprende español callejeando: El árbol de los deseos


Imagino que los últimos deseos -tener un gatito, ver animales que no se han descubierto y encontrar fósiles- los han escrito niños, y me encantan. Son concretos, posibles y se relacionan con la naturaleza y los seres vivos.

Pero a los niños también les preocupan otras cosas:


Aprende español callejeando: El árbol de los deseos



Me llamaron la atención algunos deseos muy concretos, en los que aparece la forma que + subjuntivo, porque la persona que expresa el deseo y el sujeto de la oración donde se expresa el deseo son diferentes. Vamos a verlos:


Aprende español callejeando: El árbol de los deseos


En la parte que no se ve bien pone "que ganemos". Supongo que con "nosotros/as" se refiere a las personas con las que ha creado una empresa, o a su pareja, no lo sé. Pero, madre mía, ¡estamos en 2021 y su deseo es ganar un millón de euros antes de 2023! Y además, dice, "nuestro primer millón", o sea, que esperar ganar más millones en los siguientes años. No sé si, como profesora que soy, estoy acostumbrada a no ser ambiciosa en el dinero, pero esto me parece una exageración. ¿No hay cosas más importantes en la vida que desear? En fin...

En cambio, comparto totalmente este otro deseo:


Aprende español callejeando: El árbol de los deseos


Se refiere a los partidos políticos de ultraderecha, que últimamente en todo el mundo están teniendo más presencia y amenazan con quitarnos derechos y libertades que ya creíamos que serían para siempre. 


Termino con un deseo que es perfectamente compatible con el anterior y que me ha encantado (y creo que también lo escribió un niño):


Aprende español callejeando: El árbol de los deseos



Y tú, ¿qué deseo colgarías en las ramas de estos naranjos? ¿Me lo cuentas en un comentario? ¡Hasta pronto!






miércoles, 15 de septiembre de 2021

Antes de que se enfríen las bravas

Hace ya mucho tiempo escribí la entrada Café para todos, en la que te explicaba que, cuando relacionamos dos acciones con el conector cuando y hablamos del futuro, usamos el presente de subjuntivo.

Pasa lo mismo cuando usamos otros conectores que expresan tiempo, y hoy nos vamos a pasear por varias partes de España comprobándolo.

Empezamos en Castilla y León, en un bar-restaurante de un pequeño pueblo:


Aprende español callejeando: Antes de que se te enfríen las bravas
Ucero (Soria)


Los comensales son los que comen juntos en una mesa y, la verdad, si están esperando todavía no son comensales, ¿no? Pero bueno, el mensaje se entiende: lo que no quiere el dueño de este restaurante es que la gente esté de sobremesa charlando, tomando cafés y copitas, mientras hay gente esperando que quede una mesa libre. Así que, cuando pasa esto, los cafés y los licores hay que tomarlos en la barra. 

Y es que el tiempo de la sobremesa es muy importante (y a veces muy largo) en este país, aunque con la pandemia, si estamos en interiores, últimamente tendemos a hacerlo más corto para evitar riesgos.

En este cartel encontramos el conector mientras con subjuntivo porque este mensaje se refiere al futuro, un futuro que ocurrirá siempre que haya gente esperando para comer (y aquí he usado otro conector temporal).

Nos vamos ahora a la puerta de un monasterio (el de Nuestra Señora de Gracia, que es donde nació la reina Isabel la Católica en 1451):



Aprende español callejeando: Antes de que se te enfríen las bravas
Madrigal de las Altas Torres (Ávila)


El conector una vez que significa 'después de que' (pero poco tiempo después). Como ves en la foto, a la derecha del cartel hay un timbre. El monasterio es bastante grande, así que pasa un tiempo entre que tocas el timbre y alguien contesta, y por eso probablemente mucha gente se cansa de esperar y se va. Así que las monjas han puesto este cartel para pedir a la gente que no se vaya hasta que alguien responda; en este caso, las que responden son las madres, o sea, las monjas. Madre y hermana son dos formas de tratamiento habituales para las monjas.

Encontramos aquí una vez que con subjuntivo porque, cuando nosotros llegamos a la puerta, la acción de llamar al timbre es futura. Se supone que leemos el cartel antes de tocar el timbre, pero claro, esto no siempre pasará.


El siguiente ejemplo me lo envió mi amigo Iñaki Goitia (¡gracias, Iñaki!), probablemente desde Cantabria. Me encanta el mensaje de esta bolsa, pero tendré que explicarte algunas cosas para que puedas entenderlo:


Aprende español callejeando: Antes de que se te enfríen las bravas


Vox es una palabra del latín que significa 'voz'. Hace más de medio siglo, nació una empresa editorial que es conocida sobre todo por la publicación de diccionarios. Pero en 2013 esta empresa tuvo la mala suerte de que un nuevo partido político decidió usar el mismo nombre. Mala suerte porque este partido es de ultraderecha: ultranacionalista, xenófobo, misógino y, en definitiva, franquista. ¡Tiene que ser horroroso compartir nombre con ellos! Son tan horrorosamente odiosos y peligrosos que no me extraña que alguien pida ser abrazado mientras ellos existan. Un abrazo para huir del miedo y del odio.

Hasta que, otro conector temporal, fija el límite de tiempo en el futuro, con subjuntivo, y esperemos que en este caso ese futuro llegue pronto, muy pronto. Un futuro muy próximo en el que esa palabra solo se relacione con los diccionarios.


Nos vamos ahora para Madrid en busca de más ejemplos. El primero es un cartel típico que podemos encontrar, con esas palabras o parecidas, en muchos portales de edificios de vecinos:


Aprende español callejeando: Antes de que se te enfríen las bravas
Plaza del Ángel


Cada vez que más subjuntivo porque el cartel está en la puerta y cada vez que un vecino lo lee, la advertencia es para el futuro.

Y el último es un ejemplo muy representativo de Madrid:


Aprende español callejeando: Antes de que se enfríen las bravas
Glorieta de Bilbao


Este texto anuncia una aplicación para pagar plazas de aparcamiento. Puedes pagar un tiempo determinado y luego, si necesitas más tiempo, puedes volver a pagar y extender el tiempo, todo a través de tu móvil. Así no te pasará como con las máquinas que hay en la calle para pagar: a veces has pagado, por ejemplo, una hora, y después estás en alguna actividad y te das cuenta de que se acaba la hora, y tienes que salir corriendo para ir a la misma máquina de la calle, volver a pagar y extender el tiempo. Si, por ejemplo, estás en un bar con unos amigos y habéis pedido una ración de patatas bravas (una de las cosas que tienes que probar si vienes a Madrid), cuando vuelves de volver a pagar las bravas se han enfriado.

Claro que lo mejor, estando en Madrid, es usar el transporte público. Yendo en metro o en autobús no se te va a enfriar nada.


Antes de que, una vez que, hasta que, mientras, cada vez que + subjuntivo si hablamos de acciones futuras. Y cualquier otro conector temporal que necesite un verbo conjugado: después de que, siempre que, en cuanto, tan pronto como, etc.

Hala, vete a comer antes de que se te enfríe la comida, ¡pero sigue leyendo este blog hasta que me canse de escribir en él! ¡Hasta pronto!




miércoles, 8 de septiembre de 2021

A tocateja

Este verano la mayoría de la gente tenía muchas ganas de viajar. Había ganas de viajar, sí, pero mejor hacerlo como dice este anuncio:       


Aprende español callejeando: A tocateja
Paseo de la Virgen del Puerto


Hacer algo a mis/tus/sus... anchas es hacerlo cómodamente, con toda libertad. Por ejemplo, si te sientas a tus anchas en un sofá, lo harás estirando las piernas, ocupando mucho espacio. Una combinación muy frecuente es campar a mis/tus/sus... anchas, que significa 'moverse o actual con toda libertad en un espacio, ocupándolo'. Por ejemplo:

Durante el confinamiento del año 2020, los animales camparon a sus anchas por muchas ciudades


Una expresión con un significado muy parecido es la que encontré hace unos meses en el acceso a un aparcamiento:


Aprende español callejeando: A tocateja
Avenida del Brasil


Es la expresión a tu bola, que está al final. También quiere decir hacer algo con total libertad. Por ejemplo, en este caso, puedes aparcar durante un día, cuatro horas, diez horas, el tiempo que quieras. Pero esta expresión, en primer lugar, es más informal, y en segundo lugar, normalmente tiene el significado de hacer algo como tú quieres, con total libertad, sin tener en cuenta a los demás.

La combinación más frecuente de esta expresión es con el verbo ir. Ir a mi/tu/su... bola es ocuparte de tus asuntos, sin preocuparte por otras personas. No es ni positiva ni negativa, todo depende del contexto. Vamos a verlo con dos ejemplos:

Es muy independiente y muy valiente. Va a su bola y no le importa lo que piensen los demás.

Es que hoy en día no hay solidaridad, todo el mundo va a su bola.

El primer ejemplo es una descripción positiva de una persona, mientras que en el segundo se critica un comportamiento negativo.


Te he hablado hasta ahora de dos expresiones que tienen algo en común: las dos empiezan con la preposición a, y las dos nos sirven para describir el modo de hacer algo (de viajar, de sentarse, de actuar). Y es que la preposición "a" comienza cientos de expresiones de modo.

Vamos a ver una más:


Aprende español callejeando: A tocateja
Navalperal de Pinares (Ávila)



Una moraleja es una frase que resume la enseñanza que sacamos de alguna historia. Y aquí moraleja rima con tocateja. Esta palabra solamente se usa en la expresión a tocateja, y siempre asociada al verbo pagar. ¿Y qué es pagar a tocateja? Hacerlo en el momento mismo de la compra (o sea, al contado) y con dinero (o sea, en efectivo).

No sé si, ahora que tantísima gente paga todo con tarjeta (y algunos con el móvil), la expresión pagar a tocateja perderá la segunda parte de su significado, pero por mí no va a ser. Ya sé que te va a sonar arcaico, pero yo procuro pagar lo más posible en efectivo por varias razones. Una de ellas es la que aparece en este cartelito de una de mis librerías favoritas de Madrid:


Aprende español callejeando: A tocateja
Traficantes de sueños (calle Duque de Alba)


No todo el mundo es consciente de que, cuando pagamos con tarjeta, una parte del dinero se la va a llevar el banco, y es un dinero menos que se lleva el comerciante. Personalmente, prefiero que se lleve más dinero el comerciante, que es el que más trabaja en un intercambio comercial. ¿Qué opinas tú?


A tus anchas, a tu bola, a tocateja... Hay muchísimas expresiones similares y no te puedo hacer una lista completa, pero te pongo aquí algunas asociadas a verbos con los que se usan mucho:


Aprende español callejeando: A tocateja



¡Hasta pronto!




miércoles, 1 de septiembre de 2021

¿Y tú qué prefieres?

¡Hola! 

¿Has viajado estas vacaciones? ¿A la montaña o a la playa? ¿Al campo o a una ciudad? Yo soy más de campo, de montaña, aunque en septiembre voy a escaparme unos días al mar.       

Hoy te voy a hablar de una forma para hablar de preferencias, que es la que he usado en la frase anterior ("yo soy más de..."). La misma que usan en este anuncio:


Aprende español callejeando por Madrid: ¿Y tú qué prefieres?
Calle Libertad


Y es que, si hablamos de vino, podemos ser de tinto, o ser de blanco, o ser de rosado.

Es la misma construcción que aparece en la etiqueta que está al final de este otro mensaje que vi en el escaparate de una tienda de electrodomésticos:



Aprende español callejeando por Madrid: ¿Y tú qué prefieres?
Calle Bravo Murillo


Cuando hablamos de nuestras preferencias a la hora de hacer la compra, unos somos más de pequeño comercio, otros son de hipermercados, otros de comprar por Internet, etc. Personalmente, soy más de pequeño comercio por la razón que se da en el cartel, pero también porque los pequeños comercios y la compra presencial dan vida a las ciudades y pueblos y fomentan las relaciones personales.

Seguro que, cuando empezaste a aprender español, una de las primeras cosas que aprendiste fue a decir "soy de..." para expresar tu origen. Pero esta construcción se usa mucho en la lengua informal para expresar preferencia, especialmente cuando el número de opciones es limitado (campo/ciudad, playa/montaña, costa/interior, té/café, etc.).

Te resumo su uso y te doy más ejemplos en el cartel:


Aprende español callejeando por Madrid: ¿Y tú qué prefieres?



¿Y tú qué prefieres? ¿Eres más de mar o eres muy de montaña? ¿Eres de madrugar o de acostarte tarde? ¿Eres más de pescado o más de carne o ninguna de las dos cosas? ¡Cuéntame!

¡Hasta pronto!