Hace unos meses te hablé sobre la moda de poner a las tiendas, sobre todo a los bares, cafeterías y restaurantes, nombres con la misma estructura: la + adjetivo femenino.
Pues no solo ocurre con los lugares donde comer y beber. También con otro tipo de establecimientos. Por ejemplo, he encontrado esa forma en dos locales de trabajo colaborativo (coworking) del barrio de Malasaña. El primero está en un edificio moderno:
Calle Escorial |
Manual es el adjetivo que viene de mano. Hablamos, por ejemplo, de un coche manual (frente a un coche automático) o de una habilidad manual (frente a una habilidad intelectual). En el espacio La Manual, efectivamente, trabajan artesanos, personas que hacen cosas con sus manos.
En cambio, industrial es lo que se produce gracias a la ayuda de máquinas, al menos en la actualidad.
¿Por qué estos dos lugares tienen forma femenina? No tengo ni idea, supongo que por moda. No hay otra razón clara.
Después de mi anterior entrada sobre este tema, La Doña, he encontrado muchos más ejemplos, aunque no todos usan un adjetivo detrás (a veces es un sustantivo o estructura equivalente). He encontrado también unos pocos (muchos menos) masculinos.
Muchos son nombres curiosos, porque hablan de defectos ('imperfecciones' o 'inexistencia de una cualidad') y no de cosas positivas. Pero supongo que los usan para llamar más la atención.
Como son muchas fotos, me ha parecido más bonito ponerlas todas juntas en una imagen. Si pinchas en los círculos, encontrarás información sobre la palabra y también sobre qué tipo de local es y dónde está.
He llamado a esta entrada El femenino está de moda y no Lo femenino está de moda. ¿Ves la diferencia entre estas dos frases? En el primer caso, me refiero al género gramatical; en el segundo, cuando uso el neutro lo, quiero decir 'las cosas femeninas, propias de las mujeres'.
¡A ver si pronto puedo escribir otra entrada donde diga que lo femenino está de moda -aunque no tengo muy claro, la verdad, qué es exactamente lo femenino-!
¡Hasta pronto!
¡Feliz año 2018, Marisa! ¡Qué lo pases alegre y povechosamente! Me gustan mucho tus observaciones que haces callejeando Madrid y otras ciudades, es divertido y educativo a la vez. La variedad de los nombres que la gente pone a sus locales confirma la capacidad tremenda de los españoles de inventar, impovisar y hacer sonreir (¡también pensar!)... ¡Muchas gracias!
ResponderEliminarSí, a mí también me sorprende esa creatividad y me llama mucho la atención. Feliz año para ti también, Nina, muchas gracias por escribir.
EliminarMarisa, ¡muchas gracias por las entradas llenas de información tan valiosa para los que quieren aprender más sobre España y sobre su vida de hoy!
ResponderEliminar¡Gracias a ti por tu comentario, Tati! ¡Hasta pronto!
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