No, las palabras no se las lleva el viento, por lo menos en Madrid, porque antes de que se las lleve, les saco una fotografía.
Y algunas veces, mientras veo esas fotos que he tomado en mis paseos, imagino frases combinando pequeños fragmentos. Por ejemplo:
Y algunas veces, mientras veo esas fotos que he tomado en mis paseos, imagino frases combinando pequeños fragmentos. Por ejemplo:
Supongo que Alba es la dueña de este bar, y es una mujer que sabe muchas cosas. Como yo también tengo una amiga que se llama Alba, esta es una frase que en algún momento de mi vida podría decir: Afortunadamente, Alba lo sabe.
Otras veces imagino pequeños diálogos entre carteles, pintadas o nombres de comercios:
Estas pequeñas frases pueden ser perfectamente un intercambio:
- Hoy voy.
+ Como quieras.
La segunda persona, con el uso del subjuntivo quieras, le deja toda la capacidad de decisión a la primera.
Igual pasa en esta otra conversación, donde se deja que la decisión la tome una tercera persona, la Sole.
Usar el artículo delante del nombre de una persona, como hacen aquí, es propio de algunas zonas de España, en el trato informal, pero no es lo más común.
Ahora una combinación de imágenes que trata de bebida y comida:
El secreto ibérico es una pieza del cerdo, más o menos la parte de carne que está en la zona de la axila. Muy típico del sur de España, en los últimos años se ha puesto de moda en todo el país. Queso, vino, pan, secreto ibérico y amor, ya no se puede pedir nada más (si no eres vegetariano o tu religión te prohíbe alguno de estos alimentos; en ese caso, harías algún cambio, ¿verdad?).
Y en esta última imagen reúno tres mensajes callejeros:
El chico feo es un local de conciertos. Quizá se llama así porque se dice que en las fiestas es el chico feo el que se ocupa de la música, ya que nadie quiere bailar con él. Un poco cruel, ¿no?, pero mejor tomárselo así, con humor.
Y de eso, de humor, va esta entrada. Pero observar así los mensajes callejeros también podría ser una estrategia para practicar español si estás en un país hispanohablante. Puedes, por ejemplo,...
- pensar en una pregunta y buscar posibles respuestas
- pensar en una palabra, buscar en la calle otras dos que empiecen por la misma letra e intentar crear una frase con sentido
- fijarte en cuántas palabras nuevas te encuentras por el camino y tomar nota mental de tres para luego buscar su significado, etc.
¡Puede ser un juego divertido mientras paseas! ¿Se te ocurren otras cosas que puedes hacer mientras paseas por las ciudades hispanohablantes?
Y, si no vives en una ciudad en la que se hable español, siempre puedes aprovechar el tiempo de paseo para practicar español: escuchando algo, buscando mentalmente palabras que empiezan o terminan igual, etc. ¡El paseo es el mejor momento para la reflexión y para ejercitar la memoria!
- pensar en una pregunta y buscar posibles respuestas
- pensar en una palabra, buscar en la calle otras dos que empiecen por la misma letra e intentar crear una frase con sentido
- fijarte en cuántas palabras nuevas te encuentras por el camino y tomar nota mental de tres para luego buscar su significado, etc.
¡Puede ser un juego divertido mientras paseas! ¿Se te ocurren otras cosas que puedes hacer mientras paseas por las ciudades hispanohablantes?
Y, si no vives en una ciudad en la que se hable español, siempre puedes aprovechar el tiempo de paseo para practicar español: escuchando algo, buscando mentalmente palabras que empiezan o terminan igual, etc. ¡El paseo es el mejor momento para la reflexión y para ejercitar la memoria!
¡Hasta pronto!
Marisa, no sé si me vas a recordar pero soy fiel lectora de tu blog y os adoro a ti y a madrid! Siempre me conformaba con leerte pero hace poco por fin me he venido a madrid para estudiar durante un año!! Es un sueño cumplido. Ahora me toca pasear por ella y descubrir cosas interesantes como lo haces tú. Llevo poco pero ya me está encantando y te doy las gracias por motivarme en cierto modo a seguir mis sueños. Un saludo!!
ResponderEliminar¡Guau, qué responsabilidad la mía! ¡Menos mal que Madrid te está gustando! Bienvenida a Madrid y aquí estoy si necesitas algo. Un abrazo
ResponderEliminar¡Hola, Marisa! Leí esta entrada hace rato, pero es ahora cuando tengo oportunidad de escribir un comentario, y es que en los años de mis estudios escolares solíamos jugar componiendo frases de los títulos de las películas que encontrábamos en las carteleras (o programación) que antes ponían en los periódicos, o de las propias cabeceras... y es verdad que era ¡muy divertido!
ResponderEliminarPues esa diversión es la que hay que mantener cuando se estudia un idioma. ¡Gracias por tu comentario, Nina!
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