sábado, 26 de septiembre de 2020

Ni corona ni virus (1)

¡Hola!

Hace más de dos meses que no escribo en el blog. ¿Porque Madrid ya no me inspira? ¿Porque ya no callejeo disfrutando de la ciudad? ¿Porque estoy cansada de tanta comunicación virtual? ¿Porque me falta el estímulo que es siempre la compañía de mis amigos? Pues un poco de todo, la verdad.  

Hemos pasado muy malos tiempos y seguimos pasándolos, y me he dado cuenta de que, en una situación como la provocada por el coronavirus, las grandes ciudades resultan agobiantes. Sin espacio para mantener distancia, con tus amigos viviendo lejos de ti, con el peligro de tener que usar medios de transporte llenos de gente para ir a cualquier sitio. Y un largo etcétera.

Pero esta pandemia no solo ha afectado a la vida en Madrid. En realidad está siendo un ataque directo a muchos hábitos que forman parte de la cultura de la sociedad española. Y como son muchas las cosas que están cambiando, creo que haré al menos dos entradas diferentes para este tema.

Hoy voy a hablarte de los bares. Algunos, que no tienen terraza al aire libre, ni siquiera han abierto todavía. La costumbre, tan española, de estar en la barra, justo enfrente de los camareros, incluso está prohibida en estos momentos en muchas zonas de España. Así que la tradicional convivencia en los bares ha dejado de serlo; si vas a alguno, estás menos tiempo y solamente hablas con las personas con las que vas.

Muchos echan de menos sus bares habituales. Y una empresa que lo sabe ha hecho esta campaña publicitaria saludando a los dueños de algunos bares:


Aprende español callejeando por Madrid: Ni corona ni virus
Calle Colón


Es un bar que tenía la persiana (así llamamos a este tipo de cierres metálicos que ves en la imagen) cerrada, que no había abierto todavía cuando saqué la foto. El mensaje dice que Ángel, el dueño del bar, pronto volverá a estar al pie del cañón. Esta expresión quiere decir que, como el soldado que dispara un cañón, Ángel estará cumpliendo su obligación, aunque sea difícil o esté cansado.


Otros bares (y también restaurantes, cafeterías, etc.) están pasando por malos momentos económicos y muchos puede que cierren definitivamente. Para evitar eso, una empresa fabricante de cerveza ha creado la campaña Amor de bar, que se anuncia así:


Aprende español callejeando por Madrid: Ni corona ni virus (1)
Calle Fuencarral


Por último, otros bares que abrieron en el mes de mayo y siguen abiertos animan a la gente a entrar más en sus locales con mensajes como los tres que vienen a continuación:


Aprende español callejeando por Madrid: Ni corona ni virus (1)
Calle San Mateo



Aprende español callejeando por Madrid: Ni corona ni virus (1)



Aprende español callejeando por Madrid: Ni corona ni virus (1)


El hashtag de la campaña, por cierto, es un juego de palabras bilingüe: #volBeeraverte se pronuncia, leído como si fuera español, así: /volveraverte/. Así juegan con la frase volver a verte y con la palabra inglesa beer, en español 'cerveza'.


Seguramente pensarás que los españoles estamos un poco obsesionados con los bares. Y no te falta razón si lo piensas. Durante los meses de mayo y junio, la mitad del tiempo de las noticias de televisión se ocupaba con imágenes de terrazas de bares que habían abierto; parecía que era lo único importante en el país.

Pero lo cierto es que es un sector económico muy importante (demasiado, en mi opinión, ya lo avisé hace tres años en la entrada Spanish dream) y mucha gente se está quedando y se va a quedar sin trabajo.

En fin, un panorama nada bueno, la verdad... Pero quiero terminar con una imagen de un cartel que me gustó (por eso la he usado en el título de hoy) y que habla de dos cosas que muchos españoles no queremos y de otra que sí queremos:


Aprende español callejeando por Madrid: Ni corona ni virus (1)
Travesía del Serrallo


Supongo que ya sabes que en estos últimos meses, además del problema de la pandemia, hemos tenido que aguantar feos asuntos relacionados con la corona (o sea, con el rey, y sobre todo con el exrey).

Pues eso, que ni corona ni virus, que vuelvan los bares y otras cosas que echamos de menos, pero que empiece también otro modelo económico que no esté tan basado en el turismo, ¿no?

¡Hasta pronto!