Pronto llegan las Navidades, y es una época en la que mucha gente cocina más de lo habitual. Así que el paseo de hoy va a tener relación con la cocina, y en concreto, con cosas que necesitamos cuando cocinamos.
En los nombres de establecimientos relacionados con la comida (bares, restaurantes, tiendas) es muy frecuente encontrar palabras que se refieren a objetos que usamos cuando cocinamos. Te pongo varios ejemplos, y después encontrarás una imagen donde podrás ver a qué objeto se refieren esos nombres.
Calle Colón |
Calle Bravo Murillo |
Calle Santiago |
Curiosamente, los nombres que encontramos en estos locales nos hablan siempre de un modo tradicional de cocinar que ya se está perdiendo y nunca hablan de herramientas más modernas, electrodomésticos que, cada vez más, están sustituyendo a estos objetos. ¿Están apelando a la nostalgia de la forma tradicional de cocinar, de la cocina de nuestras abuelas? Me parece que esta es la explicación.
Pero en esta imagen yo sí he incluido algunos de los nombres de estos objetos:
En el interior de una cafetería de Madrid tomé esta otra foto, donde vuelve a aparecer la palabra olla:
Calle San Bernardo |
La palabra olla se usa aquí como una metáfora, con el significado de 'cabeza'. Cuando se te va la cabeza o la olla (o la pinza, que también se dice), puede ser alguna de estas situaciones:
- Te has distraído y has perdido el hilo de la conversación:
Ay, lo siento, ¿qué estabas diciéndome? Es que se me ha ido la olla.
- Te has olvidado de algo:
Tenía que haberte llamado, lo sé, pero con todas las cosas que tuve que hacer se me fue la olla y no me he vuelto a acordar hasta hoy.
- Has dicho alguna tontería o has hecho alguna locura:
¿Te has enterado de lo que ha pasado con Jaime esta mañana? ¡Se ha puesto a gritarle al jefe y le ha llamado imbécil! Yo creo que se le ha ido la olla completamente, con tanto estrés que tiene últimamente.
En principio, no parece muy conveniente que se nos vaya la olla. Sin embargo, creo que en el mensaje de la cafetería (el de la foto anterior) nos quieren decir que a veces es bueno relajarnos y permitirnos decir tonterías o hacer locuras.
¿Te has fijado en la forma de la expresión: se me/te/le/nos/os/les va la olla / la cabeza / la pinza? Sí, es la misma construcción de la que te hablé hace unas semanas en la entrada Se me acaba la paciencia.
Y eso es todo por hoy. Me despido de ti hasta después de las vacaciones. Que pases unos buenos días, que te rías mucho, que comas muy bien y ¡deja que se te vaya la olla de vez en cuando estos días!