Mostrando entradas con la etiqueta educación. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta educación. Mostrar todas las entradas

domingo, 1 de septiembre de 2024

Aprobar no es aprender

Ahora que pronto va a empezar el curso escolar, recojo aquí algunos mensajes callejeros relacionados con el aprendizaje.

Una frase que me gusta mucho es la de este cartel, aunque no estoy segura de si es de Confucio o no:


Aprende español callejeando: Aprobar no es aprender
Calle de Santa María

El adjetivo humilde tiene varios sentidos. Es un eufemismo muy usado para decir que alguien es pobre (por ejemplo, si oyes o lees que alguien viene de una familia humilde, significa que su familia tenía poco dinero), pero aquí se usa en su sentido principal, el de 'persona que reconoce sus limitaciones', o sea, lo contrario de alguien vanidoso o arrogante.

Efectivamente, para aprender primero hay que reconocer la propia ignorancia. Si creemos que lo sabemos todo, no aprenderemos nada nuevo. Y eso vale para la escuela y para la vida.


Vamos con un mensaje más relacionado con el aprendizaje en la escuela (en el colegio, el instituto, la universidad, etc.):

Aprende español callejeando: Aprobar no es aprender
Calle Hierbabuena

En el contexto educativo, aprobar (que tiene varios significados) quiere decir 'tener un resultado positivo'. Se puede aprobar un curso, aprobar una asignatura (cada una de las materias de un curso), aprobar un examen, etc. Y lo contrario de aprobar, en este mismo contexto educativo, es suspender.

Es cierto que aprobar exámenes o cursos no siempre implica aprender. Hay formas malas de evaluar si los estudiantes han aprendido o no, y técnicas para aprobar exámenes que no implican aprender, al menos a largo plazo.

Supongo que lo que dice debajo, "ama a tu hij@", quiere decir que no debemos dar tanta importancia al hecho de si los hijos aprueban o no, sino a si los hijos aprenden o no.

Los resultados positivos o negativos de un examen o un curso se expresan con palabras (sobresaliente, notable, aprobado, suspenso) o con números (en España, normalmente, entre el 10 y el 0, siendo 10 el resultado mejor y 0 el peor), depende de las épocas y de los centros educativos. La palabra para llamar a esos resultados es nota. Los estudiantes sacan buenas o malas notas, los profesores ponen buenas o malas notas.

A finales del pasado curso, vi este mensaje, que parece de un estudiante a sus compañeros, donde aparece esta palabra:

Aprende español callejeando: Aprobar no es aprender
Ciudad Universitaria


Y el mensaje es más o menos el mismo: las notas no son tan importantes, son solo un número.


Como te he dicho, los profesores ponen notas, pero también a veces los estudiantes les ponen nota a sus profesores. Por ejemplo, regalándoles esto a final de curso:


Aprende español callejeando: Aprobar no es aprender
Imagen de Iñaki Goitia


Con rima (taza rima con notaza), los estudiantes que regalen esto a su profesor o profesora le estarán diciendo que le ponen una notaza, o sea, una nota muy, muy buena, muy alta.


El último mensaje que he encontrado sobre el aprendizaje es esta frase del poeta Neorrabioso:


Aprende español callejeando: Aprobar no es aprender
Calle del Limón


Es un mensaje sobre la rebeldía, sobre la necesidad de ser crítico con lo que otras personas quieren imponernos, y desobedecer las órdenes cuando creemos que es necesario hacerlo. ¡Estoy de acuerdo! La formación de una conciencia crítica es lo más importante que la escuela -y la vida- te puede dar.

Si vas a estudiar o enseñar este curso, ¡ánimo, humildad y paciencia! Y a pesar del título de esta entrada, ¡aprobar también es importante! ¡Hasta pronto!






domingo, 2 de diciembre de 2018

No seas cochino

Hoy os voy a hablar de costumbres, pero de malísimas costumbres de bastantes personas que viven en España.         

Paseando por un pueblo muy curioso de la comunidad de Madrid, Nuevo Baztán, me llamó la atención este cartel del Ayuntamiento:

Aprende español callejeando por Madrid: No seas cochino
Nuevo Baztán (Madrid)

En este cartel se pide a los habitantes del pueblo que usen los servicios de recogida de basura del Ayuntamiento, y entiendo que quieren pedir que los vecinos no tiren la basura en cualquier parte, en la calle o en el campo.

Lo que me llamó la atención fue la forma tan directa de decirles a los vecinos que, si hacen eso, no cumplen las normas de educación y son personas limpias. Se lo dice usando la palabra cochino, ¿la conoces?

Cochino es una de las varias palabras que tenemos en español para llamar a un animal, el cerdo (y por eso han puesto un cerdo justo encima de la palabra). Es curioso que, en un país donde se valora tanto al cerdo como fuente de productos de alimentación, al mismo tiempo se percibe al cerdo como el animal más sucio de todos. Por eso, las diferentes palabras que usamos para el cerdo, y que vamos a ver después, también se usan para insultar a otra persona, llamándola sucia.

Pero no solamente usamos cochino/a para reprochar a alguien su falta de limpieza. Tenemos también el sustantivo (una) cochinada, que puede usarse con el significado de 'acción propia de alguien sucio'
pero que también tiene otros usos metafóricos, como 'acciones o palabras groseras o inmorales (en este último sentido se aplica muchas veces a prácticas sexuales)'  o 'acciones que perjudican a otra persona'. Veamos cómo podríamos usar esta palabra con sus diferentes sentidos:


  • ¿Has visto a ese tío sacándose los mocos delante de nosotros? ¡Qué cochinada!
  • Es un viejo verde, siempre está diciéndoles cochinadas a todas las chicas que pasan a su lado.
  • No sabes la cochinada que me hicieron anoche, cuando salí de la escuela me habían robado la bici.

En todas estas frases se podría usar también el sustantivo (una) cerdada, que viene, claro, de la palabra cerdo/a.


Por las calles de otras ciudades también encontramos carteles que intentan evitar las acciones de los cochinos y cochinas que hay en todas partes:


Aprende español callejeando por Madrid: No seas cochino
Sevilla

Orinar ('mear', más informal) en la calle es, efectivamente, una de las mayores cochinadas que se pueden hacer, ¿o no?


Aprende español callejeando por Madrid: No seas cochino





Aprende español callejeando por Madrid: No seas cochino
Sevilla

El dueño de esta casa, tan bonita y típica del barrio de Santa Cruz de Sevilla, debe de estar harto de pintar y repintar sus paredes porque la gente se apoya en ellas y pone los pies hacia atrás. Seguramente mucha gente lo hace sin darse cuenta, pero para los dueños es una cochinada (en los dos sentidos, de suciedad y de perjuicio).

La verdad es que me gustaría mucho saber por qué en España hay tanta gente que hace este tipo de cosas, para saberlo y para explicártelo, pero no tengo ni idea. Para mí, es algo bastante inexplicable.

Bueno, ya que no te puedo explicar el fenómeno, por lo menos te voy a dar palabras para calificarlo. 


Aprende español callejeando por Madrid: No seas cochino



Las palabras de la izquierda son los diferentes nombres del animal (pobre, que no tiene ninguna culpa de lo que hacen algunas personas) y también las que usamos para calificar a las personas con comportamientos sucios. Podemos usarlas como adjetivos o como sustantivos:


  • ¡Pero qué cochina eres! ¡Deja de hacer ese ruido asqueroso con la boca!
  • Es un cerdo. Tiene su habitación llena de basura.


Las palabras de la derecha son siempre sustantivos y las usamos para las acciones (o palabras). Se pueden usar con los mismos sentidos que la palabra cochinada, excepto guarrería, que se suele usar para hablar de suciedad, y guarrada, que suele tener los otros sentidos metafóricos.

Te pongo un ejemplo final con una de estas palabras:


Aprende español callejeando por Madrid: No seas cochino
Calle Hierbabuena

Como ves, la palabra guarrería se aplica a la falta de limpieza.

Y aquí te dejo, porque esta entrada se está convirtiendo en una verdadera guarrada. ¡Hasta pronto!




domingo, 15 de abril de 2018

Instrucciones para comportarse correctamente en el metro

El escritor argentino Julio Cortázar (1914-1984) escribió varios textos dándonos instrucciones para llevar a cabo acciones de la vida diaria: Instrucciones para llorar, Instrucciones para cantar, Instrucciones para matar hormigas en Roma, o, como la que se recoge en el vídeo siguiente, Instrucciones para subir una escalera.     



Parte del encanto de estos textos está, precisamente, en que nos da instrucciones para hacer algo evidente, algo que todos sabemos hacer. Y por eso, viendo algunas instrucciones que recientemente han aparecido en el metro de Madrid, me he acordado de ellos.

En muchos pasillos del metro encontramos, por ejemplo, estas instrucciones:


cómo usar las escaleras mecánicas


Las escaleras mecánicas se inventaron a finales del siglo XIX. Unos años después, en 1909, se pudieron ver las primeras en España, concretamente en Valencia, en una exposición. Y las primeras escaleras mecánicas permanentes se instalaron en una tienda de Zaragoza en el año 1936.

En el metro de Madrid, la primera escalera mecánica se puso en 1961. Han pasado más de 50 años desde entonces. ¿Es que la gente todavía no sabe cómo usarlas? ¿O es que el metro de Madrid escribe textos literarios imitando a Julio Cortázar?

Pues creo que ninguna de las dos cosas. El problema es que, por algún motivo que desconozco, cada vez más gente se comporta inadecuadamente en los espacios públicos. Eso, en un lugar como el metro, donde hay muchísima gente, se nota mucho y molesta, y yo, personalmente, estoy harta de esos comportamientos incívicos ('descorteses, de mala educación') o estúpidos (muchas veces provocados por estar usando el móvil).

Si leemos las instrucciones, nos daremos cuenta de las cosas que la gente hace y no debería hacer. Te las voy a poner en dos fotos, para que puedas leerlas mejor:


cómo usar las escaleras mecánicas


cómo usar las escaleras mecánicas


La mayor parte de estas instrucciones se refieren a comportamientos tan lógicos, tan lógicos, que nadie debería recordárnoslos. Pero parece que no son tan evidentes para mucha gente...

Dentro de los vagones ('diferentes partes de un tren') también han puesto carteles con instrucciones. Estas son todavía más de estilo Cortázar:


tú haces metro


Aunque he dicho que son al estilo Cortázar, es verdad que muchísima gente no cumple estas normas tan básicas: escuchan la música de su móvil y te obligan a escucharla, ponen bolsas y mochilas en los asientos, hablan por teléfono en voz alta, se sientan en el suelo, no ceden el asiento a nadie (aunque hay asientos especialmente reservados para ancianos y embarazadas) y se ponen en la puerta de salida impidiéndote bajar. 

Hay más comportamientos incívicos habituales que no están reflejados en este cartel. Uno que me pone especialmente nerviosa es que, cuando vas a bajar en tu estación, un montón de gente se pone delante de la puerta y no te lo permite, e intentan subir antes de que tú bajes. Otro es el de la gente que lleva su mochila a la espalda y se mueve con ella dándote golpes al hacerlo.

De todas formas, el cartel que más me ha gustado es uno que pusieron hace pocos días:


despatarre


Supongo que el dibujo te ayuda a saber cuál es el significado de la palabra despatarrado. De todas formas, despatarrarse no solamente se usa en este contexto; se puede decir para describir esa posición corporal en cualquier otro sitio, y aplicado tanto a hombres como a mujeres. Por ejemplo:

Llegué cansadísima y lo primero que hice fue despatarrarme en el sofá.

Este es un comportamiento típicamente masculino (aunque también algunas mujeres lo hacen) que no es nuevo sino de gran tradición. Pero no vamos a mejor. Yo tengo un truco para esta situación: cuando voy a sentarme al lado de un hombre despatarrado, cojo mi bolso, o mi cartera, o mi carpeta (lo que lleve) y lo pongo entre mi pierna y la suya con fuerza, de manera nada disimulada. Puedo deciros que siempre, siempre, cierran las piernas lo suficiente y nunca me dicen nada. ¡Este truco vale también para los hombres que no se despatarran, porque también ellos son víctimas de otros hombres maleducados!

¿Ocurren estas cosas también en el transporte público de tu ciudad? ¿Qué otros comportamientos incívicos no soportas en los espacios públicos?

¡Hasta pronto!



domingo, 10 de diciembre de 2017

Con lengua... y con literatura

un abrazo con lengua o con literatura

       
Encontré este poema de Irene X en un muro del barrio de Malasaña. No sé si puedes leerlo bien, porque está escrito sobre una superficie rugosa ('no lisa'), así que te lo voy a escribir:

Un abrazo.
Con lengua.
O con literatura.
Con lo que tú prefieras.
Ojalá conmigo.

La verdad es que lo del abrazo con lengua me suena raro, lo entendería mejor si fuese beso con lengua. Pero quizá incluye todo: abrazo con beso (y el beso con lengua, o sea, con la lengua dentro de la boca de la otra persona). No es una manera muy romántica de describir un beso ni un abrazo, pero mucha gente la usa humorísticamente en la lengua informal, y, además, aquí la poeta juega con los dos significados de la palabra lengua:




Tradicionalmente, en España se han estudiado juntas, como una sola asignatura (llamamos así a los diferentes bloques temáticos en los que se divide el programa de un curso), la lengua y la literatura, pero no necesariamente tiene que hacerse así. ¿Pasa lo mismo en tu país? 


El poema de Irene X nos va a llevar a darnos un paseo por la lengua y la literatura en las calles de Madrid y otros lugares de España. Un poquito de cada.

Y empezamos con la lengua. Algunos carteles que encontramos por la ciudad se refieren o pueden referirse a cosas que aprendemos en la clase de lengua. Como este, que nos habla de algo que aprendemos muy pronto en el colegio:

mmm se escribe con m de mercado
Calle Marqués de Viana

Seguro que tú también aprendiste muy pronto la frase ¿Cómo se escribe? en español, ¿verdad? El anuncio empieza con ¡mmmmmmmmm! porque este sonido es el que hacemos muchas veces cuando probamos algo de comer y queremos expresar nuestro placer. Con este anuncio, el Ayuntamiento de Madrid nos anima a comprar en los mercados tradicionales que hay en todos los barrios de la ciudad,  y donde se pueden comprar más alimentos frescos, en lugar de hacerlo en los grandes hiper y supermercados.

El nombre de este restaurante también se refiere a la forma de escribir:


punto y seguido
Calle Andrés Mellado

Llamamos punto y seguido al punto que se escribe al final de una frase que después sigue con otra frase, sin cambiar de párrafo. Al punto que termina un párrafo lo llamamos punto y aparte. Y al que termina un texto, punto y final.

Creo que con este nombre los del restaurante quieren decir que volveremos pronto a comer allí, ¿no?

También encontramos nombres de lugares relacionados con la gramática. El siguiente, por ejemplo, podría referirse a un tiempo de los verbos, el pretérito imperfecto (ese tiempo del pasado que tan fácil es confundir con los pretéritos indefinido y perfecto; si quieres repasar la diferencia, puedes leer la entrada La maté porque era mía).


el imperfecto
Plaza de Matute

Claro, el adjetivo imperfecto/a es una palabra de uso común y el nombre de este bar puede referirse simplemente al propio bar, que es imperfecto, o a su dueño, que también lo es (como todo el mundo, jejeje).

Muy gramatical suena también el anuncio de este otro bar, Aceytuna:


el aperitivo superlativo
Calle Fuencarral

Superlativo/a significa 'muy grande, muy bueno o que tiene alguna cualidad en un grado muy alto'. En gramática, se usa esta palabra para la expresión de una cualidad en un grado muy alto (por ejemplo, grandísimo, altísima o los más coloquiales superbonito, requetefeo, etc.).

Aperitivo superlativo es una creación humorística gracias a su rima y a la combinación de esas palabras, poco habitual. Creo que quiere decirnos que ofrecen aperitivos de buenísima calidad (y no sé si de gran cantidad).



Como te he dicho al principio, en España solemos unir la lengua y la literatura en una sola asignatura, y eso vamos a hacer hoy en esta entrada. Hemos paseado por carteles que pueden tener relación con la lengua, y ahora por algunos relacionados con la literatura. De estos solemos encontrar más, pero vamos a ver solamente cuatro, para que haya la misma cantidad de lengua y de literatura.

Vamos por orden cronológico y empezamos en el siglo XVII:


la dama boba
Calle del León

la dama boba
Calle del León

El nombre de este restaurante es el de una obra de teatro, una comedia del escritor Félix Lope de Vega (1562-1635). Bobo significa 'tonto', y es que la mujer protagonista de esta comedia parece tonta, pero después se descubrirá que no lo es en absoluto.

Damos un salto en el tiempo para llegar al siglo XIX


Sotilezas
Villacarriedo (Cantabria)

Esta tienda de recuerdos y productos típicos es un homenaje a la novela Sotileza del escritor cántabro José María de Pereda. Las novelas de este autor son de tipo costumbrista y nos cuentan cómo era la vida diaria de la gente de su tierra. Un poco pesadas para la mayoría de los lectores actuales, pero interesantes si quieres aprender sobre esa época y esa zona del norte de España.

Nos vamos ahora al siglo XX, cuando hace justamente un siglo nació la poeta Gloria Fuertes, que fue famosa, sobre todo, por sus poemas para niños, pero que escribió mucha poesía para adultos. Por este centenario de su nacimiento, hace unos meses pusieron esta placa en la puerta de la casa donde nació:


Gloria Fuertes
Calle de la Espada

Avanzado ya el siglo XX, concretamente en 1981, se publicó la novela Los santos inocentes, de Miguel Delibes, ambientada en la Extremadura de los años 60 del siglo XX, que muestra las tremendas injusticias y diferencias sociales y el atraso económico en la Extremadura rural ('del campo') de la época. Esta novela, y la serie de televisión que se hizo basada en ella, tienen relación con la pintada que vemos debajo:

milana bonita
Calle Tiziano

Las palabras milana bonita que aparecen a la derecha las dice con frecuencia un personaje de esa novela (y de la serie), uno de los inocentes a los que se refiere el título de la obra. Inocente significa 'sin culpa' o 'sin mala intención', pero hace años se usaba también para hablar de la discapacidad intelectual. En la obra, uno de estos "inocentes" va siempre acompañado de un pájaro, una milana, a la que continuamente llama milana bonita, milana bonita

La serie de televisión se hizo muy, muy popular, y estas palabras han quedado en los oídos y la memoria de varias generaciones de españoles. Hace poco tiempo, por ejemplo, se creó una asociación llamada Milana bonita para luchar por tener una buena comunicación por tren en Extremadura. La elección de este nombre no es casual, porque ellos consideran que la falta de un tren rápido es una muestra del atraso que padece esta zona de España. Esta es la portada de su página de Facebook:




Aparece un fotograma de la serie y a la izquierda podemos ver al famoso personaje y su milana. Interesante esta influencia de la literatura en la vida de cada día, ¿verdad?

¿Te ha gustado nuestro paseo por la lengua y la literatura?

Un abrazo.
Con lengua.
O con literatura.
Con lo que tú prefieras.
Ojalá conmigo.



martes, 31 de octubre de 2017

Calle del Pez

Hace un tiempo dediqué una entrada a la Calle de la Paz y hoy, cambiando una sola letra, nos vamos a la calle del Pez, para seguir con el tema de los peces que comencé en Un pez, dos peces, tres peces. La calle de hoy se llama así al menos desde el siglo XVII. La leyenda dice que aquí vivió una niña que tenía un pez al que quería mucho y que terminó muriendo. Su padre ordenó poner un pez en la fachada de su casa, y ese pez puede verse todavía hoy, aunque la casa que hay ahora no es la casa original:                


casa del pez


Esta calle, una de las más importantes del barrio de Malasaña, es todo un universo en el que se mezclan los más diversos tipos de gentes y establecimientos.

Encontramos, por ejemplo, uno de los conventos más antiguos de la ciudad, el convento de San Plácido; en ese convento ingresó la niña de los peces, precisamente:


convento de San Plácido



Es un convento de clausura, lo que quiere decir que las monjas tienen poco contacto con el mundo exterior. Sobre él se cuentan muchas historias interesantes que ocurrieron sobre todo en el siglo XVII, cuando se creó, como el intento de seducción de una monja por parte del rey o la relación de algunas monjas con el demonio.


Y así como encontramos en esta calle a unas mujeres que viven ahora casi como se vivía hace siglos, en la misma calle vemos una escultura que representa a una mujer muy diferente:


Tras Julia


Esta escultura se llama Tras Julia, y su autor, Antonio Santín, quiso con ella hacer un homenaje a una mujer que se atrevió a ir a la universidad (a la Facultad de Derecho, que estaba muy cerca, en la calle San Bernardo) en 1840, cuando todavía no podían estudiar las mujeres en ella. Para conseguir asistir a las clases, se vistió de hombre. 

Esta Julia probablemente sea en realidad Concepción Arenal, una escritora y pionera del feminismo español que, efectivamente, en 1841, fue como oyente a la Facultad de Derecho con el pelo cortado y vestida de hombre. Se examinó, tuvo un buen resultado, y gracias a ello le permitieron ir a las clases, pero no pudo matricularse oficialmente y, por lo tanto, no consiguió ningún título. La primera mujer española que consiguió matricularse de forma oficial fue Elena Masera, en 1872, gracias a un permiso especial del rey, pero tuvo también muchas dificultades.

Claro que la chica de la escultura no puede ser ni Concepción Arenal ni Elena Masera, porque en su época las mujeres no vestían así, pero la escultura quiere ser un homenaje a estas mujeres valientes.

Y no podía faltar otro homenaje a un tipo de mujer que también existió en el barrio de Malasaña:


bruja yipi yipi yeah


Mis ya queridos (les he sacado tantas veces en este blog que les he tomado cariño) artistas Yipi Yipi Yeah homenajean aquí a la figura de la bruja, que últimamente está bastante de moda.


Hay muchos más contrastes en la calle del Pez: antiguos palacios (ahora convertidos en apartamentos) al lado de viviendas bastante pobres, y también tiendas de ropa vintage al lado de La Moda, una tienda que abrió en 1896:


ropa para niños La Moda


De esta tienda, me encanta el maniquí del escaparate, que está en la tienda desde su fundación:


La Moda


Como puedes ver, el maniquí representa a un niño que está comiendo chocolate y ensuciándose la boca, algo que les encanta hacer a casi todos los niños, ¿verdad? Y a algunos mayores también...

Que la tienda tiene más de cien años nos lo recuerda esta placa en el suelo, delante de la puerta del establecimiento, que, desde el año 2006, el Ayuntamiento regala a las tiendas que cumplen cien años, a los comercios centenarios, y que, afortunadamente, a pesar de las ventajas que tienen las grandes cadenas, todavía son bastantes en Madrid:


placa comercios centenarios Madrid


Encontramos también, claro, unos cuantos bares: bares tradicionales y sencillos como El Palentino, que algunos consideran "el bar más madrileño", junto a cafés y bares de copas más sofisticados. 

En El Palentino hizo Manu Chao el vídeo de una de sus canciones, Me llaman calle, que dedica a otro tipo de mujeres que desde hace siglos también abunda en el barrio: las prostitutas. Aunque en la calle del Pez no es tan habitual ver prostitutas, sí sigue siéndolo en algunas calles más escondidas del barrio. Este es el vídeo:




 
Algunos de los nombres de los bares de esta calle tienen relación con el nombre de la propia calle:



pez tortilla


No es que exista un pez que se llame así, es que la especialidad de este bar son las tortillas.



pez gordo


Un bar de cañas y tapas que hace referencia a la expresión pez gordo que vimos en la entrada Un pez, dos peces, tres peces.

Y un bar más que habla de peces, una cervecería donde también se toman buenas tapas, sobre todo los fines de semana:



pontepez



He leído en el periódico Somos Malasaña que ponerse pez se usa en algunos pueblos de León con el significado de 'emborracharse'. No lo sé, porque no he podido encontrar información, pero me parece que ese significado sale más del parecido fonético entre ponerse pedo y ponerse pez. Ponerse pedo es una expresión informal, usada sobre todo por los jóvenes, que significa eso, emborracharse. Como la calle se llama Pez y empieza por las mismas letras que pedo, pues eso... Ya te he hablado alguna vez de la imagen social que tiene el alcohol en España, y este es un ejemplo más.

Fíjate si la calle del Pez tiene historias, que incluso hay un libro con cuentos que se ambientan en ella; algunos me gustaron mucho.




Y hasta aquí nuestro paseo de hoy. ¿Qué te ha parecido? ¿Existe una calle del Pez en tu ciudad? Es muy posible...


¡Hasta pronto!


sábado, 19 de noviembre de 2016

Libertad, tan pequeñita


paz y libertad
Calle Alemania (Málaga)

Es algo constante, a lo largo de la historia, el deseo del ser humano de disfrutar de las dos cosas que se nombran en la obra de arte urbano de la foto de arriba. Pero también a lo largo de la historia ha habido siempre minorías que provocan guerras o que intentan dominar a los demás, quitándoles su libertad. Muchas veces, cuando la gente no se siente libre, lo muestra en los muros de las calles y los edificios. Y, aunque supuestamente España es un país libre, aquí también encontramos ese tipo de pintadas:


WC de la FNAC (calle Preciados)

Esta pintada en una puerta de un baño protesta por la falta de libertad de pensamiento. Una jaula es el espacio en el que las personas metemos a muchos animales, por ejemplo a los pájaros que tenemos en nuestras casas. Esas jaulas no tienen paredes, tienen barrotes de metal para que el animal no pueda salir pero se le pueda ver.

La pintada habla de ellos: quieren, sus normas. Se refiere, claro, a las personas que tienen el poder y que, a través de los medios de comunicación y de las leyes, intentan convencernos de que pensemos igual que ellos. Realmente, es difícil tener un pensamiento libre e independiente en medio de tanta información como recibimos (no hablo solamente de la radio, los periódicos y la televisión, sino de los mensajes que leemos en la calle, en los medios de transporte, y, cómo no, de las redes sociales, que los poderes también intentan manipular). Desde que nos despertamos hasta que nos dormimos estamos recibiendo mensajes, y no tenemos tiempo para analizarlos todos con calma.

Otra cosa que influye en nuestra libertad de pensamiento son las personas que nos rodean. Fíjate en lo que dice esta otra pintada:

solo solos somos libres
Barrio de Malasaña

Esta frase se ha extendido mucho, desde las paredes de las calles, hasta Internet, y puedes encontrar muchas imágenes de pintadas y entradas de blog sobre ella. Para mí, solo solos somos libres significa que las personas somos totalmente libres cuando podemos pensar y decidir sin influencia de otros. Así que los demás también son una amenaza para nuestra libertad. Sin embargo, para la mayoría de nosotros vivir sin comunicarnos con otros seres humanos sería un horror, así que preferimos ser un poco menos libres y compartir nuestra vida con otras personas, ¿no? Eso sí, es importante que las personas con las que convivimos respeten nuestras ideas y nos dejen un espacio de libertad. Esto es fundamental.

Las paredes nos hablan también de otra manera en la que la sociedad da forma a nuestro pensamiento, quitándonos libertad:


Universidad Complutense (foto de Marta Rodríguez)

Encadenar significa 'poner una cadena para que no te puedas mover', y una cadena es un objeto formado por piezas redondeadas, generalmente de metal, que se unen unas a otras. Por ejemplo, los dueños de los perros usan muchas veces cadenas para llevar a sus perros de paseo; también usamos cadenas cuando aparcamos nuestra bicicleta en la calle, para que no nos la roben.

Encadenar se usa frecuentemente en un sentido metafórico, como pasa en esta pintada: si el sistema educativo no te permite pensar libremente, produce el efecto contrario, te convierte en una persona sin voluntad propia, en una parte poco crítica del sistema político y social. De esto ya te hablé un poco en la entrada Abre las aulas.

Hay muchos poemas y canciones sobre la libertad, nuestro tema de hoy. Te voy a dejar con tres de mis canciones favoritas sobre el tema. La primera es del grupo Los suaves, una banda de rock gallega; la mayoría de sus canciones me resultan un poco duras, pero esta, Libertad, me parece preciosa. De uno de los versos de esta canción he tomado el título de esta entrada: Libertad, tan pequeñita




La segunda es del grupo andaluz Jarcha y se llama, justamente, Cadenas. Este grupo fue muy popular en los años 70 y hacía un tipo de música inspirada en el flamenco, con toques modernos.




La tercera y última es Para la libertad. La letra de esta canción es un poema de Miguel Hernández y la canta el cantautor Joan Manuel Serrat. Es uno de los poemas más apasionados sobre la libertad escritos en español, probablemente porque su autor murió por eso, por defender la libertad. Eso sí, en la lengua no poética no diríamos "para la libertad", sino "por la libertad".





¿Cuál te ha gustado más de las tres?

Y, antes de despedirme, otra pregunta para ti: ¿tú también sientes que vives en una jaula? Porque yo sí, muchas veces.

¡Hasta pronto! ¡Sé libre!




jueves, 8 de octubre de 2015

Abre las aulas

En los últimos años, la educación en España ha sido un campo de batalla para los políticos: los cambios de leyes educativas han llegado con cada gobierno, afectando a los planes de estudio, a la financiación de las escuelas, a todos los aspectos de la vida educativa. Por otro lado, la crisis económica ha sido la excusa para invertir menos en la enseñanza pública (menos profesores que trabajan más, más estudiantes en cada clase, menos dinero para becas, etc.), al mismo tiempo que cada vez se da más dinero a las escuelas privadas (en España llamamos concertadas a las escuelas privadas que reciben dinero público, así que tenemos tres tipos de educación: pública, concertada y privada). 

Por todo esto, no es extraño que haya habido numerosas huelgas (forma de protesta que consiste en no trabajar, o, si se trata de estudiantes, en no ir a las clases) y manifestaciones (reunión pública de personas que protestan recorriendo algunas calles) en el sector educativo, aunque no han servido para nada:


llenamos las calles
Calle Fuentidueña
Tomé la foto de esta pintada en los muros de un instituto de enseñanza pública de la Villa de Vallecas. Es un llamamiento a hacer huelga el 24-O (24 de octubre). Quieren vaciar las aulas (que ningún estudiante vaya a las salas donde se dan las clases) y llenar las calles de estudiantes protestando.

En la fachada de otro instituto muy céntrico y muy antiguo, el Cardenal Cisneros, vi esta otra pintada:


echa a volar
Calle de los Reyes

Esta pintada tiene un aire mucho más poético, ¿verdad? No parece una pintada de protesta, pero en el fondo creo que sí lo es. Quizá tú la entiendas de otra manera, pero a mí me parece que nos dice que el mundo educativo a veces es muy cerrado y está lleno de normas, y que en ese mundo no tienen mucha importancia valores como la imaginación, la creatividad y la libertad. Y parece que cada vez menos: nuestros gobernantes actuales son más partidarios de que los niños aprendan religión, economía o informática, y además sin ningún sentido crítico.

Por eso la pintada invita a los profesores o a los estudiantes o a ambos a abrir las aulas y echar a volar (desarrollar su libertad y su imaginación fuera de los centros educativos; están jugando también con la cercanía de dos palabras: aula -el lugar donde se celebran las clases- y ala -la extremidad que permite volar a los pájaros-). Echar a, aquí, significa 'empezar a'; solamente usamos echar con este significado en combinación con algunos verbos de movimiento (echar a correr, echar a volar, echar a andar), y echarse, en forma reflexiva, que usamos sobre todo con llorar (De repente, se echó a llorar). La forma echar a andar se usa también, metafóricamente, con el significado de 'empezar a funcionar algo': Ya ha echado a andar el campeonato de fútbol.

Unos ejemplos para que recuerdes mejor este uso del verbo echar:


echar a correr echar a volar echarse a llorar


Tengo que echar a correr ya para no llegar tarde a clase, así que ¡hasta pronto!