Hay una leyenda bastante extendida sobre el uso de las preposiciones en español que dice que no se pueden usar dos preposiciones juntas. Como casi todas las leyendas, tiene algo de verdad (no es frecuente usar dos preposiciones juntas en español), pero una mayor parte de mentira: sí se pueden usar, y se usan en algunos casos. Y lo vamos a ver con fotos que en este caso no son de Madrid, sino de lugares más al norte.
Hoy te voy a hablar de un caso, el más frecuente, que es el que aparece en este cartel:
Santoña (Cantabria) |
Con verbos de movimiento (ir/venir, salir/entrar, etc.), en España (y no en Latinoamérica) usamos frecuentemente la combinación de preposiciones a por para expresar la idea de 'ir a buscar (o conseguir o comprar) algo'. Decimos, por ejemplo:
- ¿A dónde vas?
- A por el pan.
Este uso puede ser a veces favorable para la comunicación, porque evita posibles ambigüedades:
- Voy por la tarta (puede significar que la razón para ir a un sitio es que van a dar una tarta muy buena)
- Voy a por la tarta (voy a recoger / comprar la tarta)
Si nos referimos a personas, como en el caso de la fotografía, puede tener el mismo sentido. Aquí alguien habla con una persona a la que llama huesitos (eso nos da una idea de que se trata de una persona delgada, porque solemos decir de alguien muy delgado que está en los huesos), y le declara su intención de conseguirla. Yo lo interpreto positivamente, en el sentido de que esta persona va a luchar, a hacer todo lo necesario para que Huesitos sea su pareja. Pero no puedo estar segura, claro.
Muchas veces lo empleamos, hablando de personas, en el sentido de 'ir a buscar / recoger a alguien':
- Voy a por mi hijo, que está en un cumpleaños (voy a buscar a mi hijo)
Pero esta misma forma, ir a por alguien, puede contener una amenaza:
Ávila (Castilla-León) |
La cámara de vigilancia y la palabra putero (que se usa despectivamente para hablar de los clientes de las prostitutas) ya nos indican que el mensaje va a ser crítico o amenazante. En este caso, entendemos la acción de ir a por como la de controlarlo, ir en su contra, ir a buscarlo para denunciarlo, hacer todo lo que se pueda contra él.
Es frecuente que en los campos de fútbol los aficionados de un equipo canten la frase A por ellos, y en este caso ellos son los del otro equipo, claro, a los que hay que combatir. Igualmente, las personas que están en contra de la prostitución van a por los clientes de las prostitutas, para acabar con la prostitución.
Como te he dicho antes, este uso es exclusivamente de España y suena raro en el resto del mundo hispanohablante, pero en España, si decimos ir por algo/alguien, sin usar la preposición a, se entiende que vamos a causa de algo o de alguien, o en lugar de alguien, pero no que vamos a buscarlo.
Esto es todo por hoy. ¡Hasta pronto!
Hola Marisa, qué explicación más clara y útil! Antes, esta construcción de "a por" me sonaba muy raro, pero ahora me resulta lógico despues de leer tu entrada que muestra el cambio de sentido al quitar el "a". Gracias por explicar detalles como éstos que también son importantes.
ResponderEliminarHola, Kristin, me alegra que te haya resultado útil. Gracias por decírmelo. Saludos,
EliminarMarisa